Si no lo hacen, asegura que corren el riesgo de no tener ninguna representación en los cargos de elección de segundo grado aún por definir en el Congreso Nacional.
"Por ahí va el escenario, entonces cuando ya se vio esa apertura o les queda sentarse y dialogar o simplemente dejarle la direccionalidad a esa Comisión Permanente para que elijan a todas estas autoridades", dice Aguilar.
Si los liberales, nacionalistas y el Partido Salvador de Honduras (PSH) no participan en la negociación, corren el riesgo de que Libertad y Refundación (Libre), como ya lo hizo con el Ministerio Público, designe a los nuevos inquilinos en la Unidad de Política Limpia.
También a los miembros del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) y, lo que es más delicado, a los titulares y suplentes del Consejo Nacional Electoral (CNE) y del Registro Nacional de las Personas (RNP), además del Tribunal Superior de Cuentas (TSC).
La negociación
"Detrás de la negociación entre las bancadas del bipartidismo, encabezadas por nacionalistas y liberales, con Libre, existen dos hechos concretos que sostienen los analistas y políticos: la impunidad y el interés de los alcaldes por mantener la opacidad en el manejo de sus recursos.
Pero esto es algo que niegan los alcaldes nacionalistas, al asegurar que la presión ejercida tiene como objetivo poner fin a la parálisis legislativa de casi 100 días.
Los alcaldes liberales autorizaron a la bancada y a las autoridades del partido para negociar las tres nuevas magistraturas del TSC. Dos días después, los ediles nacionalistas hicieron lo propio.
Pero la petición de los alcaldes, advierte Pablo Carías, sociólogo, no deja de causar sospecha. Para él, está claro que muchos de ellos temen que el desorden y el manejo discrecional que hacen de los fondos municipales salga a la luz.
Todo aquel que se sienta señalado o amenazado querrá contar con el respaldo de un representante en este organismo institucional. Sorprendentemente, ha habido un inusitado interés de los alcaldes por intervenir en este problema, lo que alimenta las sospechas."
¿Impunidad?
Según la diputada independiente Ligia Ramos, todo parece indicar que se busca negociar impunidad con ese acercamiento, ya que una gran parte de las corporaciones municipales se ha caracterizado por mantener en la opacidad la forma en que administra sus recursos
"Es obvio que aquí hay una presión para venir a negociar impunidad, ya que el manejo de los fondos públicos por parte de las alcaldías es bastante nebuloso; no hay transparencia", refiere.
Desde la Asociación de Alcaldes Nacionalistas, rechazan que sus decisiones estén motivadas por el interés de generar impunidad, ya que su único propósito es contribuir a poner fin a la parálisis legislativa, que ya acumula casi 100 días.
"No tenemos miedo, sin embargo tenemos que ir trabajando en función de que nuestro país avance. Creo que no podemos estar sentados ante una parálisis legislativa que ha tenido el Poder Legislativo de casi tres, cuatro o cinco meses", dijo Wilmer Mendoza, alcalde de San Jerónimo, Comayagua.
Al final de cuentas, solo la presión de las bases nacionalistas y liberales hacia sus cúpulas pudo lograr lo imposible: sentar a ambas instituciones centenarias en la misma mesa, hacer un acercamiento, aunque solo bajo la premisa de orquestar la repartición proporcional del órgano contralor.
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