En ese sentido, negó específicamente cualquier tipo de acuerdo con el también expresidente Manuel Zelaya Rosales (2006-2009), esposo de la actual presidenta Xiomara Castro y figura clave en el partido oficialista Libertad y Refundación (Libre).

En un tono irónico, Lobo Sosa respondió a las acusaciones a través de X (antes Twitter): "A los que dicen que tengo arreglo con 'Mel' para que me hicieran requerimiento fiscal y evitar ser extraditado a Estados Unidos, pídanle que instruya lo quiten para que así no haya impedimento".

Y agregó: "Dentro de dos años veremos quiénes son extraditados".

Varios críticos de exmandatario han especulado que Estados Unidos podría pedirlo en extradición por delitos de narcotráfico, pues su hijo, Favio Lobo, quien condenado a cadena perpetua en ese país por tráfico de drogas, operó, incluso durante su mandato y sin que lo detuviera.

Lobo Sosa ha dicho que no sabía que su hijo fuera narcotraficante.

Las declaraciones del exmandatario hondureño surgieron como respuesta directa a las afirmaciones del diputado de Libre, Eliud Girón, quien, el pasado miércoles, aseguró que el exmandatario no es un "perseguido político" sino que está siendo "ayudado".

"(A Porfirio Lobo Sosa) se le está apoyando al tener un caso aquí, lo que evitaría cualquier pedido de extradición a Estados Unidos, porque en el auto acordado de extraditado no se puede enviar a alguien que tiene un juicio pendiente en Honduras", señaló Girón en una entrevista con la radio HRN.

Porfirio Lobo Sosa enfrenta actualmente acusaciones por fraude, relacionadas con su presunta participación en el caso Pandora II, una red de corrupción que operó entre 2010 y 2013, durante su mandato.

Este caso, según el Ministerio Público, involucra el desvío de millonarios fondos del erario para financiamiento ilícito de campañas políticas del Partido Nacional.

A pesar de ello, el exgobernante se defiende de estas acusaciones y niega estar buscando protección ante una eventual extradición a Estados Unidos.

Lobo Sosa y el proceso de JOH

Aunque ha sido mencionado en distintos procesos penales en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, especialmente en relación con el expresidente Juan Orlando Hernández (2014-2022), Lobo Sosa sostiene que no tiene ningún arreglo para evitar ser llevado ante la justicia estadounidense.

En una entrevista el 11 de octubre con Hoy Mismo de TSi, Lobo Sosa afirmó que las acusaciones en su contra no tienen fundamento: "No es una acusación de 'compadre hablado' para evitar una extradición, no tiene nada que ver con lo demás. Uno sabe dónde está parado".

Añadió que durante mucho tiempo se ha especulado sobre su posible extradición, pero hasta el momento no ha ocurrido.

En la acusación presentada por la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York contra Juan Orlando Hernández en febrero de 2022, se alega que Lobo Sosa fue beneficiario de importantes sumas de dinero procedentes del narcotráfico, a través de sobornos de Alexander 'Chande' Ardón, exalcalde de El Paraíso, Copán, considerado un capo del narcotráfico por Estados Unidos.

Estos fondos, según la acusación, habrían financiado la campaña presidencial de Lobo Sosa en 2009.

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