Una mañana no es mañana sin dos cosas: un rayo de luz y una buena taza de café.

Desde la temperatura de infusión hasta la relación entre la cantidad de agua frente a la de café, son muchos los parámetros que desempeñan un papel crucial a la hora de determinar el sabor del café recién hecho.

Conseguir un café perfecto no es algo que dependa exclusivamente del tipo de cafetera que tengamos en casa, ni del tipo de café que usemos. Al parecer, la finura y la cantidad del polvo resultante a la hora de moler el café también influyen en el resultado.

Rommel Adnan Melghem Rivera, es un catador de café originario de una zona productora del grano muy reconocida a mundial por producir uno de los mejores cafés, Márcala, La Paz, Honduras.

GENTE tuvo una amena conversación con el talentoso catador y nos dejó unos pequeños tips a considerar un buen café.

Acerca del marcalino

Rommel Melghem.

Rommel es un amante del café gracias a muchos factores, culturales, herencia o tradición, nació en un ambiente a la par del cultivo del café, siendo parte de la sexta generación de una familia dedicada al cultivo de cafés finos y de muy buena calidad, ¿Qué mejor experiencia que nacer y crecer en una zona productora y de paso muy importante en el mundo del café como es Marcala? Nos dice con orgullo y una sonrisa en su cara.

R: Mi entorno y su influencia dio como resultado que pasará de ser un productor a un catador de y esta experiencia me ha permitido adentrarme aún mucho más el mundo del café en temas de calidad e innovación, y a entender que mediante mis destrezas y conocimientos yo puedo ayudar a muchos productores, especialmente pequeños productores a que mejoren sus ingresos por medio de producir mejores café cada temporada.

¿Qué es un buen café?

R: Es poder disfrutar los olores y sabores que emana el café, seguro esos atributos abren la mente y el corazón de cualquier consumidor para adentrarse y comprender su origen y valorar el esfuerzo de producirlo y sensibilizarlo para que se conecte y apoye a las familias de productores.

¿Amargo o dulce?

R: Amargo no es un atributo del café, es resultado de un tipo de tueste oscuro que elimina los buenos atributos del grano sobresaliendo entonces este sabor no agradable.

Así mismo cuando hablamos de dulzura en este caso hablaremos de una dulzura propia de los azúcares que ya tiene el grano de café en forma natural, sin adicionar edulcorantes o azúcares artificiales… Teniendo en cuenta que hay cafés amargos y dulces. La dulzura natural en el café es sinónimo de buena calidad y procesos del mismo, esta dulzura se puede percibir o apreciar cuando lo degustamos sin necesidad de azúcar.

¿Oscuro o claro?

R: A mi gusto, al igual que muchos fanáticos del café nos aferramos a los cafés con un tueste medio. Cuando hablamos de tueste medio es referente a un tueste color marrón donde podemos percibir los verdaderos atributos que un café puede expresar.

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¿Cítrico o dulce?

R: Un buen café es cítrico y a la vez dulce, esta combinación hace que algunos cafés sean únicos. Los cafés de Marcala, mi región de origen, expresan precisamente un sabor cítrico y es ese atributo uno de los elementos que los ha hecho famosos a nivel mundial.

5 Tips para hacer un buen café en casa

1. Molerlo antes de prepararlo

Los granos recién molidos tienen más compuestos de sabor que el vino, pero se deterioran rápidamente cuando están expuestos al oxígeno. Por eso se recomienda molerlo antes de prepararlo, para evitar que se oxide, conservando así todo su esplendor.

2. La conservación del café es esencial

Los granos se deben guardar en un lugar alejado del sol, sin olores y cerrado herméticamente, para así evitar que entre en contacto con el oxígeno.

3. Usa una muy buena taza

Los requisitos primordiales son que no sea de un material poroso, para que una vez lavada no queden residuos ni olores. Que sea una taza que mantenga la temperatura del café, evitando que se enfríe. La porcelana no es conductora del calor, por ende es perfecta para mantener la temperatura por mucho tiempo, sin quemarnos. De no tener, podemos calentar una taza con agua caliente, luego desecharla y servir el café, de esta manera el café conservara su temperatura por más tiempo. No se recomienda el uso de vasos plásticos, aunque debemos reconocer que es un buen aliado si queremos llevarnos un café al trabajo.

4. Sigue las instrucciones del fabricante

Es fundamental ya que cada café tiene sus especificaciones. Así como también es importante estar atento al tipo de “molienda” que le vamos a dar. Los granos que se muelen con mayor grosor hacen más difícil que el agua penetre y extraiga los componentes sólidos del café.

5. La temperatura del agua

El agua no debe estar hirviendo a la hora de preparar el café, pero sí muy caliente. Déjala reposar un minuto tras hervir, para luego hacer un rico café.